Nissan celebra la pasión por los clásicos con el concurso “Dinissan Exalta lo que Permanece” En el marco de la conmemoración de sus 65 años en Colombia, Nissan decidió rendir homenaje a los vehículos que han dejado huella en la memoria de los colombianos.

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Una marca con más de seis décadas en el corazón de los colombianos

Para ello organizó el concurso “Dinissan Exalta lo que Permanece”, una iniciativa que convocó a propietarios de modelos clásicos de la marca con el objetivo de destacar no solo el estado y la estética de sus autos, sino también las historias personales que los han convertido en verdaderos íconos familiares y culturales.

La convocatoria, abierta entre el 11 y el 29 de agosto de 2025, recibió decenas de postulaciones. Los participantes compartieron fotografías y anécdotas de sus vehículos, desde los legendarios Datsun hasta los Nissan Patrol que marcaron época en la movilidad rural del país. Tras una primera selección del jurado, 12 semifinalistas pasaron a la fase de votación pública en Instagram, donde el entusiasmo de la comunidad digital fue clave para elegir a los ganadores.

Tres historias que siguen rodando

El concurso dejó tres ganadores que representan la diversidad de legados alrededor de Nissan en Colombia.

Primer lugar: Hernando Nieto y su Nissan Patrol 1960 (Cimitarra, Santander).
Este emblemático Patrol naranja ha acompañado a Nieto desde 2002. Durante años fue su herramienta de trabajo en la región del Urabá, transportando mercancía en condiciones difíciles. Más allá de su uso laboral, el vehículo fue protagonista de un episodio que marcó su vida: un accidente en la vía Cimitarra–Bucaramanga del que salió con vida gracias a la resistencia de la carrocería. “Ese carro me salvó a mí y a mi perrita. Ya es parte de la familia y no pienso venderlo”, afirma, a pesar de haber recibido ofertas millonarias por él.

Segundo lugar: William Acero y su Nissan Patrol 1960 (Facatativá, Cundinamarca).
Este vehículo ha permanecido en una misma familia por más de 50 años y hoy, gracias a la dedicación de Acero, luce impecable tras un proceso de restauración. Su historia es un reflejo del valor de preservar piezas que no solo son automóviles, sino testimonios de la evolución del transporte en Colombia.

Tercer lugar: Mario Andrés Acevedo y su Datsun 280ZX (Duitama, Boyacá).
El sueño infantil de tener un deportivo japonés llevó a Acevedo a rescatar un Datsun en mal estado y convertirlo en una joya personalizada. Con un motor L28 Turbo, intercooler, inyección Protuners y una pintura amarilla distintiva, el auto encarna la pasión por los detalles y el esfuerzo de armarlo pieza por pieza. “Este carro representa todo lo que soñé desde niño”, afirma con orgullo.

Más que automóviles: compañeros de vida

El concurso puso de relieve que los vehículos clásicos no son simples máquinas, sino auténticos compañeros de viaje. Carlos Caicedo, Gerente General de Dinissan, lo resumió con estas palabras: “Estos vehículos no son solo medios de transporte. Son testigos de historias familiares y personales. Con este concurso quisimos honrar eso que permanece.”

Los ganadores recibieron bonos de combustible, restauraciones profesionales y kits exclusivos de merchandising, premios que refuerzan el compromiso de Nissan con quienes mantienen viva la esencia de la marca.

Una celebración del legado y la innovación

El éxito del concurso refleja la estrecha relación entre Nissan y sus usuarios en Colombia. La compañía, representada por Distribuidora Nissan (Dinissan) desde hace más de seis décadas, ha sabido combinar tradición y modernidad, ofreciendo vehículos que responden a las necesidades del mercado local sin perder de vista la innovación global.

Hoy, mientras la industria automotriz se transforma hacia la electrificación y la movilidad sostenible, Nissan reafirma que el vínculo emocional con los vehículos sigue siendo fundamental. El concurso “Exalta lo que Permanece” fue un recordatorio de que cada auto conserva historias que trascienden generaciones.

Un futuro que mira al pasado con gratitud

En un país donde los autos clásicos despiertan admiración y nostalgia, iniciativas como esta no solo fortalecen la relación de la marca con sus clientes, sino que también resaltan la importancia de preservar el patrimonio automotor. Cada Patrol, cada Datsun o Almera restaurado es parte de una memoria colectiva que ha acompañado a familias enteras en su cotidianidad.

Con este homenaje, Nissan no solo celebró su aniversario número 65 en Colombia, sino que también consolidó una comunidad de entusiastas que ven en sus autos un símbolo de resiliencia, orgullo y pertenencia. Porque al final, lo que permanece no es solo el motor, sino las historias que se escriben a su alrededor.

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